Noruega frena los incentivos al vehículo eléctrico particular para fomentar el transporte público

En Noruega, donde las políticas de introducción del vehículo eléctrico en su parque de turismos han sido exitosas hasta situar al país a la cabeza de Europa, se plantean actualmente políticas para reducir el uso del vehículo privado, sean eléctricos o no, y fomentar el uso del transporte público y la movilidad activa. Un vehículo eléctrico sigue siendo un vehículo que ocupa espacio en la vía pública, tiene costes elevados de fabricación/adquisición y mantenimiento, es menos eficiente energéticamente que otras soluciones de movilidad y tiene efectos medioambientales negativos como las emisiones por abrasión de neumáticos en el asfalto.

Los coches eléctricos proporcionan un transporte más ecológico, pero también tienen una clara competencia intermodal con el transporte público en las zonas urbanas y se deben de hacer esfuerzos para que sea más atractivo viajar en transporte público, en bicicleta y a pie. La manera de abordar esto en dicho país ha sido reducir los incentivos a la compra y uso de vehículo eléctrico que estaban comprometidos hasta finales de 2022. De esta forma, el gobierno pretende atajar el problema actual de que muchos ciudadanos pueden estar prefiriendo usar su vehículo eléctrico antes de usar el tren o el autobús.

Desde 1990 existen en Noruega incentivos a la compra de vehículos eléctricos y a la instalación de infraestructura de recarga. Hasta llegar a la cifra de que prácticamente 2 de cada 3 vehículos comprados en 2021 fueron eléctricos y a tener un parque con casi 500.000 vehículos eléctricos en todo el país, algo menos del 20% del total del parque de turismos. Solo tres años antes, en 2018, la cifra de vehículos eléctricos vendidos correspondió a un tercio del total; un 5,5% en 2013. El Parlamento Noruego ha establecido el objetivo de que no se vendan más vehículos de combustión a partir de 2025, algo a conseguir sin prohibiciones pero con un sistema fiscal verde.

En España la penetración del vehículo eléctrico es mucho menor, con una penetración en 2021 del 8% y un parque total de 150.000, solo un 0,6% del total, según Anfac. Las nuevas matriculaciones de vehículos eléctricos siguen creciendo año a año pero a un ritmo menor que el deseado y necesario para cumplir los objetivos del país según el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, PNIEC. Las ayudas públicas a la compra e instalación de puntos de recarga, por tanto, siguen estando justificadas.

Más información en los siguientes enlaces.