El teletrabajo y sus efectos positivos en la movilidad

En un artículo del Número 85 de la Revista de Salud Laboral ISTAS-CCOO se caracteriza la movilidad al trabajo y se establece la relación entre teletrabajar y un modelo de movilidad al trabajo más sostenible. Además, se plantea cómo incluir la movilidad al trabajo en los planes de movilidad de empresa.

La movilidad al trabajo es el primer motivo por el que nos desplazamos cotidianamente en España y es en esta movilidad cuando más se utiliza el vehículo privado con motor de combustión. Asimismo, es el motivo para realizar los desplazamientos cotidianos más largos. Algunos estudios de los que se disponen demuestran con datos este actual modelo de movilidad al trabajo insostenible:

• Según diferentes estudios de movilidad al trabajo en distintas regiones de España entre los años 2011 y 2018, los desplazamientos al trabajo rondan los 25 minutos de duración por trayecto. Sobre la base de 25 minutos por trayecto, se dedica de media cerca de 15 horas al mes en desplazarse hacia y desde el lugar de trabajo.
• Según el Observatorio de la Movilidad Metropolitana, el 63% de los desplazamientos con motivo trabajo en las 20 áreas metropolitanas consideradas se realiza en vehículo privado.
• Según estudio de ISTAS-CCOO de 2016, el trayecto medio en vehículo privado y con motivo trabajo de ciudades medianas es de 12 km, algo que se puede traducir en 216 € de gasto mensual.

Algunas de las consecuencias negativas de este modelo insostenible de movilidad con motivo trabajo son las siguientes:

• Mayor accidentalidad. Los accidentes in itinere suponen alrededor del 10% del total de accidentes y el 20% de los accidentes mortales y no han parado de crecer en los últimos años.
• Factor de exclusión social. No todos los ciudadanos tienes acceso a un vehículo privado ni la posibilidad de vivir cerca de su lugar de trabajo. Por tanto los gastos en transporte y el tiempo dedicado a él hacen que haya grandes diferencias en la renta disponible y el tiempo dedicado al ocio y a los cuidados entre las familias según su lugar de residencia/trabajo.
• Consumo excesivo e ineficiente de energía en forma de combustibles fósiles. Algo que tiene graves consecuencias globales ambientales y en el bienestar de las personas

Sin embargo, las tareas que realizan los trabajadores y las trabajadoras a menudo se basan en herramientas digitales cuyo uso no está vinculado a un lugar en particular. Cabe entonces la pregunta: ¿por qué no reducir la cantidad de viajes con motivo trabajo? Esto conllevaría los siguientes beneficios:

• Ahorro de tiempo y coste para el trabajador.
• Descongestión del transporte público en horas punta.
• Descongestión del tráfico rodado que genera mayor velocidad comercial y fiabilidad del transporte público y mayor espacio para resto de usuarios de la vía (peatones y ciclistas).
• Nuevo criterio para cambiar o permanecer en el trabajo actual dinamizando el mercado laboral.
• Reducción de la dependencia del vehículo privado para acceder a un puesto de trabajo aumentando la igualdad de oportunidades.
• Posibilidad de retención y fijación de población en zonas rurales.
• Impulso a los comercios locales al desincentivar el abandono del lugar de residencia del trabajador con motivo trabajo.

En consecuencia, con la reducción de estos desplazamientos mediante la implantación del teletrabajo se reducirán los impactos ambientales, sociales y económicos que conlleva este modelo de movilidad al trabajo. La implantación del teletrabajo puede favorecer una movilidad más sostenible, aunque en este caso sea por su ausencia y no por el fomento de otros modos como alternativa el uso excesivo del vehículo privado. Por esta razón, algunas empresas o administraciones públicas lo han incorporado como modalidad organizativa, o pretenden hacerlo, esgrimiendo, como uno de los argumentos principales la disminución del tiempo dedicado a los desplazamientos, en beneficio de la conciliación de la vida laboral y personal, pero también por los beneficios ambientales, sociales y económicos que puede acarrear en relación con la disminución de la movilidad.

La propuesta de CCOO e ISTAS es integrar el teletrabajo en los Planes de Movilidad al trabajo que desarrollen las empresas y las Administraciones Públicas. Estos planes de movilidad deben contemplar las siguientes tres fases en su proceso de elaboración:

1. Diagnóstico mediante cuestionarios y estudio de patrones de movilidad de los trabajadores (gastos económicos y de tiempo)
2. Plan de Acción con el objetivo prioritario de garantizar el derecho a una movilidad inclusiva, sostenible, saludable, segura y económica de los trabajadores y las trabajadoras, es decir, reducir la dependencia del vehículo privado motorizado para ir y volver del trabajo. Se debe establecer cómo y en qué puestos existe potencial para adoptar esta modalidad organizativa, en qué condiciones y con qué recursos. Así como, plantearse unos objetivos cuantificables y temporales a alcanzar.
3. Evaluación del plan. Para hacer el seguimiento y evaluación y establecer a tiempo las medidas que lo puedan actualizar y/o corregir

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana propone en su Estrategia de Movilidad Segura, Sostenible y Conectada estudiar, junto con otros ministerios competentes, la obligatoriedad de implantar planes de empresa de transporte al trabajo obligatorios para empresas que superen un determinado número de trabajadores mediante la futura Ley de Movilidad Sostenible y Financiación del Transporte.